LA MUJER ES COMO LA MAR
La mujer es como la mar, llena de valles y montañas.
Con grietas y grutas por explorar.
La mar es vida infinita, caprichosa-constante
de movimientos suaves y uniformes;
al navegarla es hermosa sin igual,
cautivante, monótona-cambiante...
La mar es tu rostro, es dulce, es sal,
movimiento y quietud.
Los ojos del marinero se agudizan en ella, se alegran y temen.
Temen por ellos mismos, por no poder abarcarla toda,
acaso intuirla y conocerla.
La mar es movimiento acompasado.
Así es tu carácter: indescifrable, con picos y valles,
tienen una historia, profundidad, riqueza sin igual, vida,
muerte, sufrimiento y regocijo.
El marinero rompe olas intentando recorrerla.
¿Por qué teme acaso a naufragar?
Sabe que nunca acabaría de conocerla,
que terminaría devorado y perdido.
La mar es tu infancia, tu vida, tus sueños.
Aunque no quiera la vida o la muerte
ambas surgen de ella naturalmente.
La mar es una inmensa lágrima que de Di-s brotó.
Es amor dinámico.
La mar eres tú, yo el náufrago.
Déjame morir mil muertes dentro de ti.
Revíveme en sirena para no dejarte.
Déjame conocerte.
-C.
2 comments:
si contemplas a la mujer como a la mar... definitivamente gozaras de su amor... que buenas palabras
Qué bonito!! Me gusta la forma delicada en la que hablas sobre la mujer. Es cierto que cada mujer es distinta, pero yo lo amplío al ser humano en su conjunto, cada persona es un mundo, somos seres complejos. La gracia a la hora de conocer a las mujeres o a los hombres está en averiguar ese rasgo diferencial que lo hace único/a. Asi que los hombres también sois como la mar... yo no me he cruzado a dos iguales.
Un beso!
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