SIN TÍTULO 13

Has vuelto a mi inconsciente
con las palabras que sabes usar.
Una vez más atraviesas mi corazón
y no entiendo por qué tercamente
insisto en escribir... por ti.

No me dejaré llevar más
por tus vanas ilusiones
ni por tu elocuente palabrería
bilingüe...

Solo confiaré en que lo que es mío
ya me ha sido dado desde el principio...
Pronto he de salir a su encuentro.

No me dejaré llevar por mi mente...
mucho menos por este corazón engañoso.
Me dedicaré más a escuchar,
a ver, a oír y entender...

No con mi mente y mis sentidos
sino con aquello que va más allá
de lo meramente físico y natural.
Dejaré de producir palabras para ti.

Hay de ellas muchas que llevan más peso
de lo que uno siente, piensa o articula...
y entonces, se atreve a soltarlas
como una confesión pública
al viento susurrante.

Al escribirlas y entregártelas,
iluso pensé que las llevarías
en tu corazón con el mismo amor
con que fueran escritas...

Pero ya no las encontrarás más ´
al menos no en mí...
No de mí.

-C.