Lo siento...
Quise no sentir lo que siento...
y quizás te molesto pero
no hay nada que se pueda hacer...
Circulas por mi torrente día y noche
alimentándo mi propia vida
con el recuerdo de tu sonrisa
amplia y sincera con que me dejaste
aquella noche en que tanto nos gozamos.
Todo fué una ilusión...
Tú tomaste tus pasajes y volviste
como otras veces has hecho.
Me hace falta sentirme con tigo
y por eso sé que te extraño.
-C.
Te extraño, vuelve pronto...
Renace de en medio del invierno
y trae nuevamente tu rítmico andar,
la sangre tropical con que me animas
y me invitas a bailar constantemente contigo.
Quiero volver a verte y bailar,
una vez más, hasta que raye el alba.
Hablarte al oido dulces palabras
y quizás encender tu amor por mí.
-C.
Vas atrayendo la luz del alba hacia tí,
un rayo tras otro, te llenas de haces
y te formas gradualmente
hasta volverte sólida.
Quero asirme a tu cintura
y rodear con mis brazos tu espalda.
Conocer tu geografía natural
y en movimiento libre...
mientras bailas.
Quiero poder explorar y encontrar
la dulzura de tu boca suave
que intuyo al ver en tus ojos
el deseo del contacto desbordado...
reflejo de amor escondido...
-C.
De la nada...
como de detrás de las tinieblas
en medio de la fina oscuridad que precede al alba,
se va formando tu figura indescriptible
pero familiar a estos ojos
que no paran de mirarte.
Te presiento... te siento...
escucho cómo las gotas del rocío
de la mañana que se aproxima
rozan todo tu cuerpo...
y tú, atravesando la niebla,
triunfante... te liberas y naces
de en medio de la penumbra.
No encuentro ya palabras para dibujarte...
Me siento analfabeta frente a tu luz que,
aunque apenas perceptible, penetra mis entrañas
y me llena de pétalos y mariposas
aún desde la distancia lejana y fría,
ahogándome y llenándo mis lábios,
para que no te pueda dibujar con mis palabras
y soltarte al viento viajero
en un grito desesperado...
-C.
Decía ayer a un amigo
que no soy melancólico
pues no soy de fácil llanto...
Mas he escrito en ocasiones
que mis palabras son yo mismo,
y mis lágrimas... cada letra,
y tinta la sangre mía...
tantas veces absorbida por el sustrato
sobre el cuál escribo...
Sinembargo ahora noto
que lo he anegado todo
en palabras y letras...
en tinta-sangre... al deshacerme
espasmódicamente por tu amor.
He manchado mis dedos y mis labios,
cansado ya de escribir por tí
sin que tus ojos vuelvan su mirada,
acaso por un instante,
hacia la vida misma...
el sustrato original.
-C.
Te pensé y...
Solo pasaba a saludar
porque te pensaba...
y te pienso.
Porque te pensaba pensé...
paso a saludar...
y pasé...
...pienso.
-C.
Quise envolverte...
con mis letras y mis abrazos,
y mis besos y mis palabras...
Quise encontrar el camino hacia ti
trepando por la enredadera que cubría tu espalda
y por las fuentes que brotan de tu risa.
Quise muchas cosas contigo...
desde un principio...
quise la música, el ruido y el silencio,
la voz y el grito...
el gemido entrecortado.
Lo quise todo y te quise a ti
tanto como a mi mismo.
Te quise, te quiero
y quizás te siga queriendo
un par de tiempos más...
mientras se pierden tus miradas
en la memoria que te quiere soltar ahora,
pero no puede...
Quise ser para vos, quise tener tu voz
y entrelazarla con la mía,
quise ser tu llanto y tu sonrisa...
quise serlo todo... y nada a la vez.
Quise encontrarme contigo en cientos de palabras...
en melodías y armonías rebosantes de amores perdidos
en tiempos incontables y desconocidos para muchos.
Quise, te quise...
quizás te quiero,
pero no quiero quererte ya,
pues me hace daño el recuerdo cortante.
Cada gesto, cada instante... y tus palabras
que llenaron por un instante... y hasta dos...
todo lo que había de mí en ti...
mi querida viajera de rutas mil.
Quise... te quise...
te quiero...
...olvidar.
Punto.
-C.
