Wednesday, July 25, 2007

30 SEGUNDOS

Me he negado a la escritura
para negarte a ti
o al menos para ignorarte...

Pobre, necio de mí.
¿Cómo puedo acaso dejar de respirar?
¿Cómo detener el trepidar constante
del flujo de vida?

Negarte a ti sería como
dejar de verme al espejo
para olvidar mi rostro,
y negar mis cicatrices
como desaprender lo vivido...

Tampoco puedo dejar de escribir.
Solo quise olvidarte por un momento,
(silencio)
...pero ahora vuelvo a respirar...

Inhalo.

-C.

1 comment:

Ana Cervantes said...

Querido amigo, qué bellos poemas haces, sé que me repito pero mis comentarios no son de adulación, sino de admiración. Este poema me evoca cierta desesperanza, y al respecto quiero dejarte una frase que me gusta mucho para que la apliques a tu vida (y amores):

"Es necesario esperar, aunque la esperanza haya de verse siempre frustada, pues la esperanza misma constituye una dicha, y sus fracasos, por frecuentes que sean, son menos horribles que su extinción". (Samuel Johnson)